viernes, 11 de julio de 2008


Acerca de la escritura

La invención del alfabeto fonético y de la escritura fue un verdadero acontecimiento para la historia humana. Antes de ella predominaba la oralidad y todo lo mágico, emotivo y cognoscitivo relacionado con la comunicación verbal. Santo Tomás de Aquino dijo que ni Sócrates ni Jesucristo confiaron sus enseñanzas a la escritura porque no facilitaba el adoctrinamiento. Mientras que Edgar Allan Poe indicó que el simple acto de redactar permitía hacer lógico el pensamiento. A continuación un texto de Platón relacionado con los orígenes de la escritura.

Comienza diciendo que el dios egipcio Theuth fue el primero que inventó los números y el cálculo, la geometría y la astronomía, a más del juego de damas y los dados, y también los caracteres de la escritura. En esos tiempos Thamus era rey de todo Egipto y tenía su corte en Tebas. Llegó Theuth ante Thamus y le mostró sus artes...

Thamus entonces le preguntó qué utilidad tenía cada una, y a medida que su inventor las explicaba, según le parecía que lo que se decía estaba bien o mal, lo censuraba o lo elogiaba. Así fueron muchas, según se dice, las observaciones que, en ambos sentidos, hizo Thamus a Theuth sobre cada una de las artes, y sería muy largo exponerlo. Pero cuando llegó a los caracteres de la escritura: "Este conocimiento, ¡oh rey! -dijo Theuth-, hará más sabios a los egipcios y vigorizará su memoria: es el elixir de la memoria y de la sabiduría lo que con él se ha descubierto". Pero el rey respondió: "¡Oh ingeniosísimo Theuth! Una cosa es ser capaz de engendrar un arte, y otra ser capaz de comprender qué daño o provecho encierra para los que de ella han de servirse, y así tú, que eres el padre de los caracteres de la escritura, por benevolencia hacia ellos, les has atribuido facultades contrarias a las que poseen. Esto, en efecto, producirá en el alma de los que lo aprendan el olvido por el descuido de la memoria, ya que, fiándose a la escritura, recordarán de un modo externo, valiéndose de caracteres ajenos; no desde su propio interior y de por sí. No es, pues el elixir de la memoria, sino el de la rememoración lo que has encontrado. Es la apariencia de la sabiduría, no su verdad, lo que procuras a tus alumnos; porque, una vez que hayas hecho de ellos eruditos sin verdadera instrucción, parecerán jueces entendidos en muchas cosas no entendiendo nada en la mayoría de los casos, y su compañía será difícil de soportar, porque se habrán convertido en sabios en su propia opinión, en lugar de sabios".

Platón (1962). Fedro, o de la belleza. Argentina: Aguilar

Imágenes: samaelgnosis.net

miércoles, 2 de julio de 2008


Sobre fútbol, soccer o balompié

El fútbol es "pasión de multitudes" y generador de mitos modernos. Por eso, para muchos argentinos Maradona es Dios, y para otros mortales Pelé es el rey de las numerosas naciones que conforman el planeta del fútbol. El mercado, que es quizá el supremo dios moderno, no podía dejar de ejercer su poder en tan millonario y mercenario planeta. Está triturando a sus sacerdotes. Leamos lo que escribe al respecto un entrenador-escritor argentino de muy grata recordación para cierta hinchada del Perú, por haber salido campeón con un equipo al cual se le debía alrededor de cuatro meses de su sueldo, entrenador incluido.




El último que apague la luz

El éxodo de los principales cracks sudamericanos a Europa nos priva de gozar su fútbol por más tiempo.


En Bahía Blanca, Argentina, donde pasé las fiestas de fin de año, un lustrabotas hincha de Boca se quejaba con resignación y tristeza del vaciamiento permanente que sufre el fútbol argentino.
- Se fue Banega -me decía- y ahora solo lo podremos ver por televisión.
Es ese el papel que juegan nuestros países, desde hace mucho tiempo: proveedores de talentos para los centros de poder mundial. No solo se van futbolistas, por cierto, sino también todos aquellos que no encuentran en su tierra un camino adecuado a sus sueños o necesidades.
Pero si hablamos de futbolistas, digamos que son aproximadamente 500 los que están fuera de Argentina (800 de Brasil), según los datos con que cuento. Y ocurre desde hace 30 años por lo menos. De modo que este éxodo incesante ha terminado por destruir prácticamente al fútbol argentino, con el agravante incomprensible de que, a pesar de las ventas multimillonarias, los clubes están casi todos en la ruina económica. Nó sé cómo funciona este despojo inconcebible, pero sí entiendo que se trata de un hecho que necesita una urgente aclaración y reparación.
Banega, el penúltimo en irse, tiene solo 19 años y apenas jugó un año en el primer equipo de Boca. Aterrizó en Valencia, un club que vive la que, posiblemente, sea su peor crisis en los últimos 20 años. Y como pagaron mucho por él le exigirán como si fuera un jugador consagrado, sin respetarle el proceso de aprendizaje que necesariamente tendrá que pasar. Una forma de hacerlo caminar por la cornisa, de donde se cayeron varias promesas de crack, como D'Alessandro, Aimar o Saviola, por ejemplo, quienes nunca volvieron a ser lo que fueron en Argentina.
Vivieron circunstancias totalmente adversas para sus condiciones y quisieron adaptarse a una forma de jugar que no sentían. Casualmente o no, Argentina vive en la actualidad las consecuencias de otros saqueos producto del abuso de algunas multinacionales y la corrupción de gobiernos anteriores que vendieron al país. Se están terminando las reservas de gas y petróleo y no hay energía eléctrica para todos, además de soportar serios problemas con el agua.
- Se llevan todo -me decía el lustrabotas- y ni el fútbol nos dejan disfrutar.
No supe qué decirle.

Tomado de DT, suplemento de "El Comercio", Lima 14.01.08



¿Es Cristiano el mejor?




La naturaleza le dio a Cristiano Ronaldo todas las virtudes que se necesitan para ser uno de los mejores futbolistas del mundo.
Es rápido, maneja los dos perfiles con naturalidad, lleva la pelota con las dos piernas indistintamente, le pega, y bien, con las dos, cabecea muy bien, es fuerte, tiene cambio de ritmo, dispone de un amplio repertorio de amagues y gambetas y, por si fuera poco, llega al gol con facilidad.
¿Qué más se puede pedir? Hay una canción de Serrat en la que le canta a una mujer y le dice, más o menos, que le gusta su boca, le gustan sus piernas, su cuerpo, su sonrisa, pero no le gusta ella.
Bueno, con Cristiano Ronaldo pasa algo de lo mismo. Un periodista me preguntó días pasados qué opinaba del crack portugués, porque al parecer el Real Madrid tiene intención de incorporarlo. Creo que es un gran jugador -respondí- pero a mí no me gustaría ser Rooney (su compañero en ManU), porque Rooney se pasa el partido mostrándose, apareciendo en un sitio y otro listo para recibir solo y definir, pero acaba el partido aburrido y sin la pelota, que acaparó Cristiano ignorándolo por completo.
Diría para sintetizar que el portugués, como muchos otros buenos jugadores del momento, juega al revés: primero para él y después, si no puede individualmente, busca un socio. Ese mismo virus de egoísmo y soledad afecta a Ronaldinho, Kaká y muchas veces a Messi también. Los cracks de otros tiempos tenían mayor tenían mayor conocimiento del juego, por eso Di Stéfano, Pelé, Cruyff, Platini, Zidane, Zico, Maradona, entre otros, dominaban los conceptos básicos para saber cuándo tocar, cuándo gambetear, cuándo y desde dónde atacar, cuándo frenar, etc... En otras palabras, tenían más talento que los solistas destacados del fútbol de hoy.
Yo entiendo por talento saber elegir, y jugar bien depende en gran medida de esa cualidad. El fútbol es inspiración y conocimiento. Entonces digamos que la inspiración de Cristiano Ronaldo es muy superior a su conocimiento del juego.
Lo bueno para él es que es muy joven y puede aprender, y lo malo es que se instaló en las alturas de la fama, donde es más fácil ver las cámaras y los flashes que a sus compañeros. Si consigue aterrizar algún día y tener la suficiente humildad e inteligencia como para integrarse en un equipo, entonces sí será completo y estaremos en presencia de un crack.


Tomado de DT, suplemento deportivo de "El Comercio", Lima 26.05.08


Imágenes: lariosola.wordpress.com, myopera.com